Cope.es Beatriz de Mesa 23/02/2009

“La solución al conflicto del Sáhara tiene que tener en cuenta la autodeterminación”, dijo ayer contundente Christopher Ross desde los campamentos de refugiados en Tindouf donde hacía las primeras declaraciones de su gira que comenzó en Marruecos. Con esta afirmación, el nuevo enviado especial de la ONU para el conflicto del Sáhara Occidental se desmarcaba de su predecesor, el holandés Van Walsum cuyo mandato no fue renovado después de que el Polisario pidiese su destitución el pasado agosto.

El diplomático Van Walsum presidió las cuatro rondas de negociaciones que tuvieron lugar en una sede de Naciones Unidas en Manhasset pero no hubo avances. Rabat sólo negocia a partir de su proyecto de autonomía para el Sáhara- que se enfrenta a serios obstáculos jurídicos según el Derecho Internacional- y el Polisario dialoga sobre cualquier plan que contemple el derecho de los saharauis a elegir su propio futuro. Por eso, la defensa de la autodeterminación que hizo desde Tindouf el norteamericano Christopher Ross “ha insuflado esperanzas a los ciudadanos que habitan los campamentos de refugiados”, aseguraron fuentes del Polisario desde Rabuni, la capital administrativa

El nuevo me de Naciones Unidas para el conflicto del Sáhara  quiere reactivar las negociaciones entre los independentistas y Rabat que llevan estancadas desde el pasado mes de marzo. Tras escuchar la postura del reino alauí, se desplazó a Argelia donde mantuvo una reunión de varias horas con el presidente de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD), Mohamed Abdelaziz,  y explicó que su visita a Tindouf  tenía como objetivo “avanzar en las negociaciones a las que ha llamado la ONU y por ello también debía recoger las opiniones de la parte saharaui”. Las conversaciones mantenidas con los dos actores principales del conflicto “han sido profundas e interesantes”, añadió.  Luego proseguirá la gira en Madrid, París y Washington, países con los que compartirá los diferentes puntos de vista y buscará los medios para relanzar el diálogo entre el Polisario y Marruecos que desde hace más de treinta años están enfrentados.  

Christopher Ross no adelantó la fecha para la quinta ronda de negociaciones, pero sí subrayó que se ha marcado una hoja de ruta para llevar a cabo la misión encomendada por el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon. Calificó de “muy importante” resolver este litigio para el desarrollo del norte de África. La cuestión del Sáhara no sólo afecta a la estabilidad de Marruecos, sino a toda la región del Magreb cuya evolución y desarrollo se ve truncada por la falta de acuerdo entre las partes del conflicto.