Sin embargo, ahí se acaba el optimismo. Las posibilidades de que alcancen un acuerdo que ponga fin al conflicto del Sáhara Occidental son ciertamente mínimas, porque lo que defiende cada parte es o blanco o negro, y no hay gris.

El Frente Polisario quiere un referéndum de autodeterminación en el Sáhara que incluya la posibilidad de la independencia de ese territorio con respecto a Marruecos; Marruecos ofrece una autonomía a ese territorio, que quedaría bajo soberanía marroquí, y quiere que el referéndum sólo pregunte autonomía sí o autonomía no.

Por lo tanto, es difícil encontrar un punto de contacto. Se podría estudiar alguna fórmula más complicada, como la de la soberanía compartida, pero no parece que ni marroquíes ni saharauis estén por la labor.

Y, mientras tanto, Marruecos sigue ocupando el Sáhara, y son ya 32 años.

Fuente: eitb24h