Los últimos desarrollos registrados por el problema del Sahara Occidental llaman a Argelia a hacer las aclaraciones siguientes:
Argelia constantemente y claramente ha subrayado su apoyo a una solución basada en la satisfacción del derecho inalienable del pueblo saharauí a la autodeterminación.
Esta toma de posición procede de la Carta de Naciones Unidas y de las resoluciones del Consejo de Seguridad. Las Naciones Unidas han afirmado y reafirmado que la cuestión del Sahara Occidental es una cuestión de descolonización que sólo encontrará una solución, justa y definitiva, en el ejercicio por el pueblo del Sahara Occidental, de su derecho imprescriptible a la autodeterminación.
Es obvio que, al contrario de otros casos de descolonización administrados en el marco de la ONU, él del Sahara Occidental, último territorio colonial africano, está aún pendiente.
Esta gestión ha sido esencialmente marcada por la adopción del Plan de Arreglo de la cuestión del Sahara Occidental, en virtud de la cuál la MINURSO ha sido creada y desarrollada, un alto el fuego establecido en septiembre de 1991 y la identificación de participantes potenciales en el referendo. A través de su resolución 1495 (2003), el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas ha aprobado el “Plan de Paz por la autodeterminación del pueblo del Sahara Occidental”, llamado “Plan Baker”.
Argelia está convencida que el Plan Baker sigue válido como solución política del conflicto del Sahara Occidental ya que constituye, para tal solución, el único marco jurídico reconocido y válido por la Comunidad Internacional.
Fiel a sus convicciones y a su compromiso en la causa de la descolonización de los países y de los pueblos coloniales, Argelia seguirá demostrando el más firme de los rechazos a cualquier maniobra cuyo objetivo es extraer la solución de la cuestión saharauí del marco internacional y de la autodeterminación.
Argelia seguirá aportando su ayuda a las Naciones Unidas y a su Secretario General, el Señor Ban Ki-Moon, en sus esfuerzos por alcanzar una solución definitiva al problema del Sahara Occidental que opone, desde hace más de treinta años, el Reino de Marruecos y el Frente POLISARIO.