Western Sahara Resource Watch (WSRW) publica hoy un informe que denuncia el transporte de petróleo y sus derivados a los territorios ocupados del Sahara Occidental. Las investigaciones de WSRW documentan una fuerte presencia de la compañía sueca Wisby Tankers AB en este controvertido negocio. Estas exportaciones españolas de petróleo fueron noticia esta noche en la Televisión nacional sueca.

Wisby Tankers AB ha creado un consorcio con otras empresas marroquíes cuyo resultado se llama Casablanca Tankers, que es, con mucho, el mayor proveedor de petróleo del Sahara Occidental. Dispone de dos barcos, Wisby Argan y Wisby Cedar que empezaron a funcionar en 2010, y suministran  petróleo a los territorios ocupados cada 12 días.

Descargue aquí el informe "Combustible para la ocupación - El transporte sueco de petróleo español al Sahara Occidental ocupado".

Nos movemos en unas cantidades impresionantes: los barcos suministran a los territorios ocupados una media de más de medio millón de litros de petróleo diario. En total, WSRW estima que los dos petroleros de Wisby transportan anualmente la friolera de 194 millones de litros de productos del petróleo para el Sahara Occidental –con un valor estimado de 106 millones de dólares. Ello constituye la mayor parte de los 250-280 millones de litros de petróleo que se pueden recibir anualmente en los territorios ocupados.

El negocio de Wisby Tankers sirve para sustentar la ocupación. Está claro que los saharauis también lo necesitan para su vida diaria, pero el petróleo se usa fundamentalmente por la Administración marroquí, el Ejército, los colonos y para expoliar las riquezas naturales del territorio. Sin las importaciones de petróleo, la ocupación ilegal sería prácticamente imposible de mantener. Y se da la circunstancia de que el petróleo se produce en refinerías en España, incluidas las Islas Canarias.

WSRW urge al Gobierno sueco a que formule una advertencia contra los negocios suecos en los territorios ocupados del Sahara Occidental, y exige a la compañía que cese el transporte de combustible a los territorios. WSRW urge además al Gobierno español a que garantice que los derivados del petróleo que parten de España no sean exportados al Sahara Occidental para mantener la ocupación.