Se trata de más de 2.000 vehículos militares. Terrestres y navales. Material militar que será destinado, al menos en una parte, a los territorios ocupados del Sáhara Occidental.

Marruecos es un estado conocido por su falta de respeto a los Derechos Humanos. Organizaciones internacionales independientes, como Amnistía Internacional, así lo denuncian. Gobiernos europeos, también. Desde la propia Unión Europea, también se ha censurado la política marroquí, poco, o nada, respetuosa con los Derechos Humanos.

El Derecho internacional prohíbe, explícitamente, la venta de material militar a países en los que se sufra un conflicto activo, y en donde no hay respeto a los Derechos Humanos.

Con todo, hay otro elemento, simbólico, que añada, si cabe, más dramatismo a la acción. El Gobierno español firmó estos acuerdos multimillonarios el mes de noviembre pasado. Un mes tristemente marcado en el calendarios de la historia del Sáhara Occidental: el 14 de noviembre de 1975 se firmaban, en Madrid, los Acuerdos Tripartitos, en los que Marruecos y Mauritania recibían,  de España, el territorio y la población del Sáhara Occidental.