Ben Magec Ecologistas en Acción ha exigido el fin del acuerdo pesquero al que llegó la Unión Europea con Marruecos en 2007, y renovado este año, por considerar que se están “sobreexplotando” los recursos naturales de los caladeros del Sáhara Occidental, una explotación “contraria a Derecho internacional” al considerarse por las Naciones Unidas en 2002 un territorio no autónomo, pendiente de descolonización.

El acuerdo entre Marruecos y la UE otorgó a España 101 licencias de pesca de las que aproximadamente el 50 por ciento recaen en Canarias –la otra mitad en Andalucía-. Ben Magec pone en entredicho, además, la rentabilidad de este acuerdo porque reporta a Marruecos 36 millones de euros y los beneficios por la explotación pesquera que obtiene Europa “no llegan ni a la mitad” de esa cantidad.

Estas son algunas de las conclusiones expuestas por el responsable del área de agroecología de Ben Magec, Tom Kucharz, tras la presentación del informe ‘Deuda pesquera europea y española. Implicaciones globales, causas y soluciones’.

Kucharz denunció la “sobrepesca” de la flota canaria y andaluza en los caladeros saharauis porque están cometiendo una “flagrante violación” del Derecho internacional. Además, añade que “la UE está subvencionando la pesca ilegal y no declarada que se realiza en este caladero”. Las aguas del Sáhara Occidental son ricas principalmente en merluza y crustáceos, como la gamba blanca, cigalas, langosta o langostino, aunque “el recurso más valioso” son los cefalópodos, expresan los ecologistas en el informe.

Asimismo, apunta a la necesidad de “terminar con los beneficios económicos a corto plazo” que obtiene la flota española en general y la canaria en particular a través de los acuerdos pesqueros con terceros países; “necesitamos volver a niveles sostenibles de pesca porque de lo contrario terminaremos con los recursos”. En esta línea, afirma que el 77 por ciento de las especies de peces están sobreexplotadas, “principalmente los de gran tamaño, como los atunes, bonitos o merluza”.

Ben Magec explica que este acuerdo entre Marruecos y Europa se renovó el 27 de febrero de 2011 “sólo por un año más porque hay muchas dudas sobre su legalidad en los propios servicios jurídicos del Parlamento europeo”. En esta línea Kucharz demandó una reforma global de la Política Pesquera Común que regula la normativa pesquera de la UE porque es “injusta por la explotación que se hace de los recursos naturales de terceros países, que no sólo esquilman sus aguas, sino que acaban con el modo de subsistencia de buena parte de su población”.

El informe presentado señala que la mayoría de las embarcaciones españolas de tipo industrial (82 por ciento) faenan en caladeros nacionales pero su capacidad es muy inferior a las que faenan en aguas internacionales, por eso el 64 por ciento de la pesca total se obtiene fuera de las aguas nacionales, "esto aumenta la inseguridad alimentaria en los terceros países, los niveles de pobreza y desigualdad, y por lo tanto los movimiento migratorios forzados”.

Sobre este punto, Kucharz exige también una compensación económica y social a los terceros países que han sido sobreexplotados, “no necesariamente con dinero público, sino por parte de las empresas privadas beneficiadas”. Ben Magec asegura, además, que la “sobreexplotación” que ejerce la pesca industrial es un “derroche”, y pone en valor la función de la pesca artesanal o a pequeña escala.