El Banco Central de Noruega volverá a invertir en la compra de acciones de la petrolera estadounidense Kerr-McGee, después de que la compañía abandonara en mayo pasado la prospección de crudo en el Sáhara occidental, informó el ministerio en un comunicado.

El Estado noruego, a través del Fondo de Petróleo, que también se llama Fondo de Pensiones Global, se deshizo de las acciones de la petrolera Kerr McGee en junio de 2005 por considerar inmoral la prospección de crudo que la empresa hacía en aguas de la costa del Sahara Occidental.

El Consejo ético noruego fue creado en el 2004 para velar por la compatibilidad con los derechos humanos de las inversiones del Fondo de Petróleo noruego.

El organismo aconsejó al Estado el año pasado la venta de las acciones de la petrolera estadounidense, tras argumentar que violaba las convenciones internacionales que condenan la explotación económica de los recursos de zonas ocupadas.

El consejo también explicó, entonces, que la prospección de Kerr-McGee contribuía a legitimar las pretensiones soberanistas de Marruecos sobre el Sahara occidental, territorio que ocupa desde 1975.

La petrolera, con sede en Oklahoma City (EEUU), inició la prospección de crudo en las costas del Sahara Occidental en 2001, tras firmar un contrato con el Gobierno de Rabat.

Las autoridades marroquíes anunciaron en el 2000 la existencia de importantes reservas de hidrocarburos en las proximidades de Talsint (noroeste de Marruecos), aunque ninguna empresa ha encontrado esos yacimientos.

Kerr-McGee, que ha sido adquirida por la compañía Anadarko Petroleum Corporation, abandonó la búsqueda de crudo, en una zona de 110.400 kilómetros cuadrados en la bahía de la ciudad de Bujdur, en mayo de 2006, tras cinco años de prospección infructuosa.

El Fondo de Petróleo noruego, establecido en 1990 para apartar el excedente procedente de las actividades petroleras en una caja nacional, alcanzó un valor de 187.000 millones euros en el segundo trimestre de 2006.

Noruega es el tercer exportador mundial de crudo tras Arabia Saudí y Rusia.