Reunido el miércoles en sesión ordinaria bajo la presidencia del Jefe de Estado saharaui, Mohamed Abdelaziz, el Consejo de ministros denunció la posición del Gobierno marroquí durante la segunda vuelta de las negociaciones, queriendo "imponer el hecho consumado colonial marroquí sobre los saharauis y privarlos de su derecho legítimo a escoger su futuro con toda libertad, democracia y transparencia, garantizado por las resoluciones y la Carta de la ONU ".

" Esta posición de intransigencia del Gobierno marroquí no expresa de ninguna manera la buena voluntad para acabar en una paz justa y no facilita el avance el proceso de negociación entre las dos partes", advirtió el texto.

También manifestó que esta posición reflejaba la voluntad marroquí de bloquear los esfuerzos de la comunidad internacional, como fue el caso con Plan de arreglo (ONU OUA) firmado entre Marruecos y la Frente Polisario bajo los auspicios de la ONU, los acuerdos de Houston y el Plan de paz para la autodeterminación del pueblo de Sáhara Occidental (Plan Baker) que ha sido rechazado por Marruecos.

A este respecto, el Consejo de ministros exhortó al SECRETARIO GENERAL de la ONU a presionar al Gobierno marroquí para poner fin a las violaciones del Derecho y de la legalidad internacionales e impedir a Marruecos organizar sus elecciones previstas el próximo 7 de septiembre en los territorios saharauis, así como la implicación de los ciudadanos autóctonos de Sáhara Occidental en estas elecciones." Marruecos no tiene ninguna soberanía sobre Sáhara Occidental, al que la ONU debe definir su estatuts acabando el proceso de descolonización y permitiendo al pueblo saharaui ejercer su derecho inalienable a la autodeterminación y a la independencia".

El Consejo de ministros de la RASD rindió homenaje a los héroes de la Intifada por la independencia, que llevan la resistencia pacífica en El Aaiun, Smara, Dakhla, Boujdour (Sáhara Occidental), Assa, Tantan, Zak, Asrir, Tighmirt, Mhamid El Ghezlan (el sur de Marruecos) y en las universidades marroquíes. En este contexto, el Consejo de ministros condenó la persistencia de las autoridades coloniales marroquíes en su política de represión salvaje y ciega contra los pacíficos manifestantes saharauis, particularmente los defensores de los humanos derechos, los niños, las mujeres sin distinción, que están sometidos a las diferentes formas de torturas, de secuestro y a los procesos ilegales. 

"La comunidad internacional debe asumir su responsabilidad plena en la protección de los saharauis y la interrupción de las violaciones graves de los derechos humanos cometidas por el Estado marroquí en Sáhara Occidental, territorio no autónomo que todavía se encuentra bajo la responsabilidad de la ONU en espera de un referéndum de autodeterminación".

El Consejo de ministros reiteró su llamamiento a la ONU para la publicación oficial del informe de la misión de la Alto comisionado de los derechos humanos de la ONU, que visitó Sáhara Occidental en mayo y junio de 2006, así como la puesta en ejecución de las recomendaciones contenidas en este informe y la ampliación de las prerrogativas de MINURSO en la vigilancia de los humanos derechos en Sáhara Occidental.