Y el conjunto de música rap “T.L.T.”, un conjunto formado por 12 chicos de entre 12 y 15 años surgido de los talleres de Cultura Hip Hop que Magni desarrolla en colaboración con los Ayuntamientos de Velilla de San Antonio y Aranjuez de Madrid, proyecto educativo dirigido por músicos tan relevantes de la escena del Hip Hop en español como L.E. Flaco o El hombre del viento.

El festival arrancó el 8 de junio en Valdemoro, dentro del programa “Los otros deportes”, una iniciativa de la Concejalía de Juventud y Deportes para promocionar entre los jóvenes valdemoreños disciplinas alternativas como trekking, senderismo, escalada, parkour o carreras de orientación. Se celebraron actividades dirigidas a jóvenes de 12 a 30 años como la Gincana de escalada, un concurso de skate y una demostración de parkour, también conocido como arte del desplazamiento, disciplina que consiste en transitar por el medio urbano o natural, superando los obstáculos que se presenten en tu recorrido (vallas, muros, vacío...) de la forma más fluida y eficiente posible.

Para el Director de Juventud del Ayuntamiento de Valdemoro, Víctor Cobo, “con este programa queremos animar a los jóvenes del municipio a disfrutar de su tiempo libre practicando otros deportes no tan mayoritarios. El objetivo es que aprovechen el verano para mejorar su estado de salud, amplíen sus relaciones sociales conociendo a otros jóvenes y mejoren su autoestima y se desarrollen como personas. Creo que la fiesta de presentación de este viernes va a convertirse en un lugar de encuentro en el que la música tendrá un protagonismo especial con la celebración del III Certamen de Música Multiétnica “De Fusión”; sin duda una ocasión excepcional para que descubran el poder que la música tiene como vehículo de transmisión de las costumbres y valores de otras culturas”.

Se pudo comprobar que la música actúa como terapia, como herramienta de superación, de mejora y autoestima de los niños implicados en estos diferentes proyectos que les permiten superar la situación de exclusión que viven normalmente en sus entornos habituales. Brasil, Sáhara Occidental y España, tres lugares con diferentes situaciones económico sociales, pero con niños y niñas que sufren de situaciones de vulnerabilidad. Este festival es una gran obra social, que nos ayda a concienciarnos de que es posible hacer un mundo mejor, y como no, qué mejor manera que a través de la música.

El domingo 10 de junio se celebró el segundo concierto en Campo Real, en donde continuó la fiesta, no sólo para los asistentes, sino también para todos los niños y niñas que actuaron en el concierto. Como broche final del concierto, todos los participantes se unieron en una fusión de batucada, música saharaui y hip hop. La música, nuevamente, vuelve a unir diferentes culturas y pueblos.
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