A Buslan, cuyos hermanas han permanecido entre rejas 16 años por luchar contra la invasión de 1975, no le sorprenden estos juicios arbitrarios, mediante los que pretenden doblegar a la minoría Sahari, y ahora lo único que están consiguiendo es enturbiar las vísperas de unas negociaciones entre Marruecos y el Polisario, previstas para el día 18 de este mes, que está previsto que se desarrollen sin condiciones previas y bajo los auspicios de la ONU.
Durante esta ronda de conversaciones se quiere encontrar una salida “a la disputa territorial más antigua de África y establecer el estatus definitivo de la antigua colonia española”, anexionadan por Hassan II después de que los españoles se retiraran en el año 75 y abandonaran a los saharauis a sus suerte. “Si realmente la vocación política del país ocupante es alcanzar la paz y el entendimiento con quien a lo largo de la historia ha sido su enemigo, a qué responde tanta vejación contra los saharuis en sus casas, en sus tierras y la permanente persecución en el interior del régimen”.
El presidente de la República Árabe Saharaui Democrática advierte que si las conversaciones fracasan podrían reanudar su lucha armada, que acabó con el alto el fuego en 1991, patrocinado por la ONU.