Ahmed Bujari, representante del pueblo saharaui ante Naciones Unidas, criticó en el programa La Trapera de Radio San Borondón la postura intransigente de Marruecos para resolver el conflicto, puesto que ha puesto el freno en seco al esfuerzo que estaba llevando a cabo la ONU al objetar la continuidad de la mediación del embajador Christopher Ross después de que el organismo internacional realizara duro informe en abril de este año.

Dijo que es por esta razón por la que hay un retraso de ocho meses en las negociaciones, a lo que se une que Marruecos sigue actuando bajo la mayor impunidad posible, tanto en referencia a los intentos diplomáticos por resolver el conflicto saharaui, como por su desmedida actuación en la zona ocupada.

Afirma que a nadie se le esconde que en los territorios ocupados del Sahara Occidental los derechos humanos siguen siendo violados constantemente, la represión se ha acrecentado, lo que ha motivado que en los últimos meses haya habido especial conflictividad en ciudades como El Aaiún, Dajla o Smara, pero al mismo tiempo hay un esfuerzo importante en muchas naciones de África y en general entra la comunidad internacional por no dejarse llevar por esta postura irracional de Marruecos.

En este sentido Bujari destaca las conclusiones de la Fundación Kennedy tras su visita al Sahara ocupado en un informe muy objetivo y veraz en el que se argumenta que la situación en los territorios ocupados por Marruecos sigue siendo muy grave en términos de respeto a los derechos humanos, del mismo modo que la visita del relator de la ONU para la tortura a El Aaiún ha constatado que este tipo de represión sigue haciéndose por parte de Marruecos de forma sistemática según ha ido trascendiendo del informe que se publicará en los próximos meses.

Personalmente espera que la próxima semana se lleve a cabo un debate intenso en Naciones Unidas sobre la situación en la que se encuentran las negociaciones sobre el conflicto del Sahara Occidental por el veto marroquí, máxime porque hablamos de que cada día que pasa se complica la situación de un pueblo que está siendo masacrado y aniquilado impunemente por Marruecos.

EL PAPEL DE MINURSO

Ahmed Bujari recuerda que la Minurso fue creada con un mandato único, explícito y claro, como es el organizar un referéndum de autodeterminación para que el pueblo saharaui decida libremente entre la independencia y otras opciones que se elijan, dicho lo cual explicó que en su discurso ante Naciones Unidas el hermano del Rey de Marruecos se opuso a que esta Misión incorpore en su mandato otros elementos.

En este sentido, el representante saharaui ante la ONU dijo que está de acuerdo con Marruecos, por lo que se tiene que aplicar estrictamente el mandato original y, por tanto, realizarse el referéndum de autodeterminación, sin embargo la potencia ocupante del Sahara Occidental se opone a aplicar este mandato original y se opone a ampliarlo, lo cual es una incoherencia por parte de Marruecos, pero también de la ONU porque lo permite y con ello, consiente que se sigan violando los derechos humanos en los territorios ocupados.

Afirma que el informe del Secretario General de abril fue muy explícito al evidencia que la Minurso perdió credibilidad por el tratamiento que está recibiendo por parte de las autoridades marroquíes, quienes impiden la libertad de acceso para verificar qué está pasando en el territorio, ni les dejan tener contactos con los defensores de los derechos humanos, ni mucho menos tener una mínima conexión con la población que está siendo vejada y ultrajada a diario, a lo que debemos sumar que esta misión internacional no puede ni tan siquiera comunicar libremente con la sede de Nueva York.

Bujari considera inaudito que se permita que Marruecos intercepte las comunicaciones oficiales de Minurso y que los vehículos de la misión se vean incluso obligados a circular bajo matrícula de marroquí, cuando debería llevar placa de la ONU, tras lo que afirma que esta misión está obligada a permanecer en la zona en una situación poco creíble, en la clandestinidad casi absoluta, sin que pueda por tanto velar por la seguridad del pueblo saharaui.