Al menos 16 ciudadanos saharauis han resultado heridos a causa de la intervención violenta de la Policía de Marruecos contra una manifestación pacífica organizada por la Coordinadora de Gdeim IZik en la localidad de El Aaiún, en el Sáhara Occidental ocupado.

El presidente de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD), Mohamed Abdelaziz, ha pedido al secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon, que intervenga de manera urgente para asegurar la protección de los civiles saharauis que residen en los territorios ocupados.

Abdelaziz ha subrayado que la actuación de las fuerzas de seguridad marroquíes contra los manifestantes es "una repetición de la brutalidad llevada a cabo por la ocupación marroquí contra los manifestantes pacíficos que piden expresar democráticamente su opinión a través de un referéndum libre, limpio y justo para practicar su derecho a la autodeterminación, libertad e independencia".

Así, ha solicitado a Ban que intervenga "para poner fin a la escalada de violencia, conseguir la liberación de los prisioneros políticos, desvelar el destino de los más de 650 saharauis desaparecidos y proteger a los civiles indefensos en los territorios ocupados".

En este sentido, ha recordado la responsabilidad que tiene Naciones Unidas en la región, ya que el Sáhara Occidental es, a los ojos de la ONU, un territorio jurídicamente distinto y separado del territorio marroquí.

Abdelaziz ha criticado el silencio de la comunidad internacional ante las políticas marroquíes hacia los territorios ocupados, "basadas en el cerco hermético, la represión y el saqueo de recursos naturales", según ha informado la agencia oficial de noticias saharaui, SPS.