Mucho sobre el Tíbet pero, ¿El Sahara existe?Si conoces, transformas. Si conoces, protestas. Si no conoces te manipulan.
La falta de información que nos aqueja en este sistema capitalista está causando una ausencia total de conciencia. También la imposibilidad de alzar la voz ante las injusticias. Los instrumentos maquiavélicos del capitalismo acallan nuestra sed de datos con fragmentos manipulados y remanipulados de sucesos y “democracia”.
Charlemos ahora, pues, sobre el largo conflicto del Sáhara Occidental. ¿Qué sabemos?
No está de moda hablar sobre las continuas y sistemáticas violaciones que comete el Reino de Marruecos, junto con sus aliados europeos y estadounidenses, contra este pueblo. Tampoco conviene apuntar la sordera de las Naciones Unidas ante sus propios tratados, cartas y resoluciones que recogen solemnemente el derecho de todos los pueblos a la autodeterminación.
Si muere un policía marroquí apedreado por un joven “separatista “se le llama terrorismo prosaharaui, si se mata y se maltrata día tras día a miles de personas en los territorios ocupados son “medidas de orden”. Pues bien, esto y tener a trescientas mil personas abandonadas en uno de los desiertos más duros del mundo sin libertad, sin recursos y sin tierra es, a mi parecer, Terrorismo de Estado en su más fehaciente manifestación.
Después de estos años de intifada pacifica, al frente Polisario empieza a acabársele la paciencia. La vuelta a las armas está cerca. La impasibilidad de la llamada Comunidad Internacional, los interese económicos de muchos países desarrollados en el territorio ocupado y la monarquía alauita, dictatorial y genocida hacen que el derramamiento de sangre sea la única vía ya posible para un pueblo que no se resigna a la ocupación ni tampoco al exilio. Un pueblo que resiste con voluntad de hierro, un pueblo que no calla, un pueblo que aguarda con esperanzas renovadas cada día durante 32 años, un pueblo que sólo pide libertad.
Mucho se habla de la violación de los derechos humanos en Cuba, cuna de la libertad de los hombres y mujeres socialistas y revolucionarios; pediría a todas las personas que consumen el espacio de los medios en esa sucia tarea que se replantearan cuanto bien harían si lo emplearan en hablar del Muro de la Vergüenza, ese muro de 2000km que separa familias y que representa la violación de derechos humanos por antonomasia. Por cierto que Cuba, país aquejado por un brutal bloqueo económico e ideológico, financia los estudios de los refugiados saharauis en las universidades cubanas sin ningún tipo de interés ni coste, práctica poco habitual en los países “desarrollados”.
La voz del pueblo saharaui corea “Marruecos, culpable. España, responsable”. Tras la salida de Franco del Sahara Occidental todos y cada uno de los partidos que han pasado por el gobierno han prometido, han incumplido, han expoliado y están expoliando los recursos naturales de este territorio incumpliendo, una vez más, la legalidad internacional. España responsable política, histórica y moralmente. Aunque aquí no se hace política, no hay memoria y mucho menos, moral.
Lola Guerrero Ceballos.