Los saharauis residentes en El Sáhara Occidental, antigua colonia español hasta 1975, acaban de dar un salto de gigante en su estrategia por buscar alternativas a un conflicto que dura 32 años. Esta semana, en Tenerife, se presentó de forma discreta el denominado Grupo Saharaui Independiente, que pretende «impulsar una voz propia de los saharuis ante el mundo, de forma que decidamos por sí mismos», adelantó a este periódico uno de sus promotores, M.M., convertido en el portavoz oficial aunque ruega, por ahora, conservar el anonimato hasta que no se elija al presidente de la Asociación.

El encuentro, celebrado en el Sur de Tenerife, congreso a casi un centenar de saharuis llegados de El Sáhara, Mauritania, Marruecos, Mali y Argelia.

Según las fuentes consultadas representan al 70% de los residentes de El Sáhara Occidental y parte de una premisa irrenunciable: «Hacemos un llamamiento al Gobierno español y a la sociedad civil para que oigan la voz del verdadero pueblo saharaui. No nos sentimos identificado con los participantes en las negociaciones sobre la gestión del territorio. No estamos representado ni por la delegación marroquí, ni por los enviados saharauis y, mucho menos, por los actuales negociadores que acuden a esos encuentros por orden de la cúpula del Frente Polisario».

Según el Grupo Saharaui Independiente, entre los participantes en esa reunión figuran algunos de los acusados de presuntas torturas en la querella presentada ante la Audiencia Nacional por grupos de derechos humanos.

El grupo persigue convertirse, a corto plazo, en un partido político que concurrirá a las elecciones democráticas de España

 SAHARIANO 7/2/08 - 6,00 h.