La Organización Marroquí de Derechos Humanos (OMDH) ha alertado hoy en Rabat sobre los distintos fenómenos de violencia que se han extendido en diferentes niveles y ha reclamado la aprobación de leyes relativas a las libertades y los derechos humanos.

En la presentación del informe, presentado con ocasión de la Jornada Mundial por los Derechos Humanos, el presidente de la OMDH, Mohamed Nechnach, enumeró las distintas violencias ejercidas tanto por las autoridades como por otros actores.

Concretamente, criticó el uso de violencia por parte de la policía contra las manifestaciones pacíficas, que según Nechnach ofrece "una imagen retrógrada y rechazable que debe acabar".

Nechnach señaló también la violencia ejercida contra la mujer, que lamentó que se haya convertido en un fenómeno cotidiano; al que hay que añadir -prosiguió Nechnach- la violencia "injustificada" contra los emigrantes clandestinos y los refugiados subsaharianos, contra las empleadas domésticas asiáticas, así como la violencia en las universidades tanto contra los estudiantes como contra los profesores.

Por otra parte, el presidente la OMDH recordó la necesidad de acelerar la aprobación de las leyes relativas a la promoción de derechos humanos y de libertades estipulados en la nueva Constitución marroquí de 2011, y la adopción de un marco global que rija el derecho de los refugiados que piden asilo político en Marruecos.

Por último Nechnach aplaudió la constitucionalización de la lengua amazigh (beréber), marginada en el pasado, pero subrayó la necesidad de poner en marcha los mecanismos de promoción de este idioma a fin de lograr una "verdadera igualdad" con el idioma árabe.

Por su parte, también la Asociación Marroquí pro Derechos Humanos (AMDH), mucho más crítica con el poder, publicó hoy un informe en el que se recogen numerosas críticas relativas a las prácticas legislativas y policiales, además de atropellos a los derechos en la calle, las comisarías y las prisiones del país.