El Frente POLISARIO denunció al Secretario General de la ONU, la inclusión del Sahara Occidental ocupado por Marruecos en las elecciones legislativas que tuvieron lugar ayer en este país. Mohamed ABDELAZIZ señaló que es una violación grave de la legalidad internacional y recordó la “política de violación de los derechos humanos en el Territorio que mantiene cerrado a la prensa y observadores internacionales así como el saqueo de sus recursos naturales”. Elecciones celebradas después de la reforma constitucional de julio pasado y que los voceros del régimen marroquí en España intentan vender como un avance en un pretendido proceso de transición hacia la democratización.

Ante la farsa electoral los propios marroquíes del Movimiento del 20 de Febrero llamaron a boicotear los comicios. Omar Radi, portavoz del movimiento, declaró que la Constitución fue preparada en condiciones opacas, que la campaña del referéndum se desarrolló como en tiempos de Hassan II, con resultados y cifras falsificados, inflando los números con el propósito de dar credibilidad al proceso, que la Constitución otorgada no establece la separación de poderes, organizando unas elecciones para que nada cambie y en las que las mafias electorales siguen haciendo estragos, reprimiendo las voces más críticas, con detención, prisión, ataques físicos y amenazas hacia los militantes. “Un proceso que no admite la diversidad y es antidemocrático. Y que no desembocará jamás en la democracia, se tome el tiempo que se tome.” El boicoteo fue ignorado por los medios de comunicación marroquíes y Human Rights Watch exigió que se detenga el acoso a los que lo apoyan.

Los cómplices europeos de Marruecos están interesados en legitimar el resultado electoral para seguir haciendo negocios; actualmente se tramita en Bruselas la renovación del acuerdo de pesca con el reino alaui, incluyendo, ilegalmente, las aguas del Sahara Occidental.

En España, las elecciones han echado a la calle al PSOE, aliado incondicional del majzen. Un gobierno que engañó al pueblo español. Decían que apoyaban al pueblo saharaui aunque bajo cuerda se ofrecieron a asesorar a Marruecos sobre cómo elaborar su propuesta de conceder una autonomía, proponiendo abandonar los términos de "descolonización, soberanía e independencia" y cambiarlos por "regionalización, autonomía y autogobierno" y sugiriendo para el Sáhara "una solución similar a la que España ha dado a Cataluña". Un Gobierno que hizo de la ayuda a los campamentos de refugiados en Tinduf una coartada para su nefasto papel en toda la cuestión del Sahara. Cuando hubo una pitada en un mitin del candidato socialista Rubalcaba, el ex presidente Felipe González dijo “creo que la bandera es del Sáhara... Quiero que recuerden que el 80% de la ayuda saharaui es del Gobierno de España. Si no fuéramos solidarios con ese pueblo, no habría presupuesto internacional para sostenerlo". Rajoy, próximo Presidente del Gobierno español, difícilmente puede hacer mas daño a la causa saharaui.

Luis Mangrané Cuevas
OBSERVATORIO ARAGONES PARA EL SAHARA OCCIDENTAL