Las dos activistas aragonesas, Enma Pomar y Pilar Fortuño, que, junto a otros dos cooperantes, denunciaron haber sufrido una agresión a manos de la policía marroquí en El Aaiún han presentado una denuncia ante la misión de la ONU en el Sahara Occidental. Además, las dos aragonesas permanecerán en la localidad saharaui hasta el jueves.

Zaragoza.- Enma Pomar y Pilar Fortuño, las dos activistas aragonesas prosaharauis, que fueron agredidas la madrugada del lunes en El Aaiún por miembros de la policía marroquí (Sahara Occidental), han presentado este martes una denuncia ante la oficina de la misión de Naciones Unidades en el Sahara Occidental para “denunciar lo sucedido y contar lo que han visto”.

Así lo ha explicado su compañera y activista, Pilar Ramírez, en declaraciones a ARAGÓN PRESS. Ramírez ha manifestado que ambas activistas, que permanecen en la ciudad saharaui junto a la cooperante catalana Isabel Terraza y el mexicano Antonio Velásquez, han permanecido toda la jornada “en calma” tras la tensión y los nervios vividos en las últimas horas.

Debido al suceso ocurrido el lunes, que dejó un saldo de varios heridos entre los activistas saharauis y los cooperantes, el más afectado fue Velásquez, los cuatro activistas han decidido permanecer en el domicilio particular en el que se encuentran desde este lunes y hasta el próximo jueves, momento en el que pondrán rumbo a España.

Según ha indicado la activista zaragozana, las dos aragonesas, “por motivos de seguridad”, han decidido trastocar su agenda en el Sahara Occidental y esperarán en la casa en la que están acogidas hasta el momento de su marcha. Ramírez ha indicado que “están siendo muy bien tratados todos por la comunidad saharaui y que se sienten arropados por éstos en todo momento”.

Debido a su condición de aragonesas, el Ejecutivo autonómico ha pedido información al Gobierno de España y a otras organizaciones para conocer el estado de las dos activistas cooperantes aragonesas atrapadas en la ciudad saharaui de El Aaiún. Así lo ha explicado la consejera de Servicios Sociales y Familia, Ana Fernández, quien ha manifestado su apoyo a las acciones emprendidas por el Gobierno central y el Ministerio de Asuntos Exteriores, que tiene las competencias en estos casos.

Fernández, que ha visitado varias instalaciones de La Almunia de Doña Godina, ha recordado que los Derechos Humanos se deben respetar y ha manifestado su condena en el caso de que no se hayan cumplido a la hora de tratar a las cooperantes.

“Al ser aragonesas, nosotros nos interesamos por qué haya podido ocurrir. Sólo puedo decir que hay que respetar los Derechos Humanos y que todo lo que no sea así requiere una condena por nuestra parte”, ha destacado la consejera, si bien ha matizado que aún no se tiene toda la información.

Por su parte, el Ministerio de Asuntos Exteriores ya se ha puesto en contacto con la Embajada española en Marruecos para esclarecer la situación de las cooperantes atrapadas en El Aaiún.  Según fuentes del Ministerio, el contacto entre la Embajada y las dos cooperantes es “permanente” para “resolver la situación cuanto antes”.

En el plano político, Chunta Aragonesista ha exigido una respuesta contundente ante este suceso. El secretario de Organización de CHA, Juan Campos, ha recordado que “no es la primera vez que aragoneses tienen que sufrir el ataque y la presión de la policía”.

A su juicio, en Aragón se ha dejado muchas veces muy claro el apoyo a la causa saharaui, y ha recordado que las Cortes de Aragón “han aprobado por unanimidad reiteradas declaraciones institucionales en las que la institución, que representa a toda la ciudadanía aragonesa, expresa su apoyo a la justa causa del pueblo saharaui y su derecho a la autodeterminación a través de un referéndum libre y democrático, con todas las garantías y bajo los auspicios de las Naciones Unidas”.

Sobre este asunto también se ha manifestado Izquierda Unida en un comunicado. La formación política ha mostrado su apoyo a las activistas de Derechos Humanos y observadores internacionales agredidos la madrugada del lunes por la policía marroquí cuando se encontraban en El Aaiún.

IU ha recordado que “ésta no es la primera agresión sufrida por ciudadanos españoles, por parte de los gendarmes marroquíes, que de forma absolutamente pacífica intentan mantener encuentros con reconocidos activistas saharauis de derechos humanos”.

Por ello, Izquierda Unida ha exigido que se adopten de forma inmediata todas las medidas necesarias por parte del Ministerio de Asuntos Exteriores y del Consulado español en Rabat para garantizar la integridad física de sus conciudadanas. Asimismo, muestra su más enérgica condena a la agresión sufrida por los activistas saharauis defensores de los derechos humanos y los observadores internacionales presentes en el territorio.