Fuente:ABC

La activista saharaui Aminatou Haidar no compareció ayer ante la jueza del Juzgado de Instrucción número 8 de Arrecife, en Lanzarote, para declarar en el juicio de faltas por un presunto delito de alteración del orden público, debido a problemas en su estado de salud tras cumplir hoy su cuarto día en huelga de hambre para exigir que se le permita regresar a El Aaiún y protestar por su entrada forzosa en España pese a no tener pasaporte.

El presidente de la comunidad saharaui en Lanzarote, Hamudi Isemo Mussa, junto con numerosos simpatizantes y la abogada Inés Miranda, se desplazaron a las tres de la tarde, hora fijada para la vista judicial, hasta los juzgados de Arrecife para apoyar a la activista saharui.

El representante de la comunidad saharaui en la isla aseguró que el estado de salud de la defensora de derechos humanos, conocida como «la Gandhi saharaui», es «bastante débil», por lo que anunció que aportarán a la jueza un certificado médico que así lo confirma y solicitarán que la magistrada excuse la ausencia de Haidar.

En este sentido, la activista saharaui, debido a su huelga de hambre y su débil estado de salud, se desplaza desde ayer en una silla de ruedas con ayuda de sus acompañantes. Además, fuentes cercanas confirmaron que Haidar, «tras declarar que no quería ver escenas de violencia a su alrededor y debido a la tensión que cada noche supone su expulsión del aeropuerto de Lanzarote», decidió el martes salir del aeropuerto «a pesar de las pocas fuerzas de las que dispone».

Por otro lado, el ministro de Asuntos Exteriores del Gobierno central, y centro de todas las críticas, Miguel Ángel Moratinos, ha anunciado que hoy viajará a Marruecos donde se reunirá en Rabat con su colega marroquí, Taib Fasi Fihri, para abordar la situación de la activista saharaui y poder llegar a una solución del conflicto.

Respeto a las autoridades

Moratinos se entrevistará con Fasi Fihri durante su visita a Rabat acompañando a los Príncipes para la inauguración de la nueva sede del Instituto Cervantes. Sin embargo, el ministro volvió a criticar a la activista «por no estar facilitando las cosas al Gobierno».

«Debería tener algo de respeto a las autoridades que le están permitiendo defender su causa, que es perfectamente legítima. Le pediría que tuviera un comportamiento similar al que tiene el Gobierno español», dijo el ministro.

Pese a esto, la comunidad saharaui en Lanzarote ha expresado su «esperanza» en la cita que mantendrá Moratinos hoy en Rabat para intentar llegar a una solución.